La experiencia religiosa camino de la mística

J. L. Vázquez Borau

La persona, que tiene experiencia religiosa, tiene la impresión de salir de sus límites, de entrar en otra realidad distinta de lo cotidiano. Normalmente se describe esta experiencia en términos de rapto, de luz, y hasta de éxtasis. Esta experiencia escapa de las dimensiones de espacio y de tiempo. Vive un tiempo que no miden los relojes. A veces, por un corto instante, tiene la sensación de que su vida no se limita a la sucesión de sus actos. Adquiere una nueva orientación de su existencia, que se encuentra asociada a otras vidas.


Capítulo La experiencia estética como fuente de belleza.

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